Spotlight (2015)

A lo mejor soy la única que lo piensa pero, desde mi ignorancia cuasi absoluta sobre esta profesión —lo que hoy en día no significa demasiado, porque cualquiera puede hacer como que sabe de todo en las redes y quedarse tan ancho—, me da en la nariz que la carrera de periodismo está un poco de capa caída, a lo mejor por eso mismo que he dicho entre líneas. Abundan en los periódicos vídeos graciosetes sacados de YouTube, cotilleos de alcoba y gags que no dan más que para diez o doce líneas. Pero no parece que eso tenga la mayor importancia mientras que esas supuestas noticias vengan rodeadas del pertinente número  de banners, cortinillas y otros tipos de publicidad que, dicho sea de paso, ¡se pueden bloquear! (si no sabéis cómo, pegadme un toque y os enseño un par de truquillos). Porque la publicidad es fundamental para que el periódico saque el dinero para… ¿para hacer investigación o para subir más vídeos de YouTube? No me queda claro, la verdad.

spotlight, acabo de salir del cine, poster

En 2002, un equipo de reporteros del Boston Globe destapó los escándalos de pederastia cometidos durante décadas por curas de Massachussets. La publicación de estos hechos, que la archidiócesis de Boston intentó ocultar, sacudió a la Iglesia Católica como institución.

Frente a eso, nos encontramos con Spotlight, una película que ensalza, ante todo, la profesión del periodista clásico, el que va a todas partes con un bolígrafo y una libreta apaisada de espiral, el que se patea calle tras calle, recibe insultos, muy de vez en cuando le invitan a un café y tiene que sufrir presiones de todo tipo. El que, ¡madre mía!, no parece saber que existe algo llamado Internet. Este periodismo está provisto de cierto halo de nostalgia,  de duda, porque no sabemos si aún existe quien dedica uno, dos o más años a investigar un tema, a atar cabo tras cabo asegurándose de que todo lo que va a decir es cierto y está documentado —igualito que ahora, ¿verdad?—, quien espera, paciente, el momento adecuado para publicar. ¿Que arrecia el atentado de las torres gemelas de 2001? Pues toca esperar unos meses más. No puedo dejar de pensar, al terminar la película, si estamos ante una profesión extinta o si aún queda quien se dedique a estos temas (y se lo paguen, que también sería un tema interesante a plantear).

Y ante todo esto, el tema de los casos de pederastia en el seno de la iglesia católica parece poca cosa. Porque, aunque la película esté basada en hechos reales y tenga su culminación en el premio Pulitzer al servicio público que el equipo Spotlight del Boston Globe recibió por desenmascarar este asunto, no dejo de pensar que el tema podría haber sido otro cualquiera, da igual cual, porque lo que importa es hablar de la ética de un equipo de cuatro personas, de su perseverancia, de su moral incorruptible pero también de sus miedos, su temores, su ira hacia los curas implicados pero también hacia sí mismos por tener que callar hasta tener todo resuelto. Es cierto que, sin la cuestión de los abusos sexuales de fondo, la película no habría tenido, con bastante seguridad, la misma proyección ni audiencia —basta con que la Iglesia se enoje para que todos quieran saber por qué—.

En esta investigación que avanza a un ritmo muy pausado, dejando de lado flashbacks macabros —hay quien los habría utilizado, sin duda— y cualquier aspecto mórbido del asunto, lo que reluce por encima de todo son las brillantes interpretaciones del reparto.

Mark Ruffalo me está suponiendo sorpresa tras sorpresa, aunque ya os lo decía aquí. Pero me reafirmo: cada vez me gusta más. Lástima que he visto la película en versión doblada. Eso sí, desprende una energía que a mi me deja agotada. Es que la gente tan positiva me cansa, qué queréis que os diga. Pero bien. Michael Keaton también estupendo, muchísimo más contenido que en Birdman, donde le superaba el histrionismo. Kiev Schreiber también bien, y mira que no le recordaba yo ningún papel sobresaliente. De hecho, he echado un vistazo a su filmografía y sigo sin encontrárselo. Acepto sugerencias, si es que las conocéis.

Me ha gustado. Mucho. De las cuatro candidatas que he visto es, de momento, mi favorita. Tal vez en algún momento me ha resultado demasiado lenta y se le podría haber imprimido un poco más de ritmo, pero aún así bien.

Y voy a decir cual ha sido mi escena favorita, e igual os sorprende: en el momento en que todos llegan a la redacción después de los atentados del 11S, se quedan mirando tres pantallas de televisión, cada una sintonizada en un canal diferente: una emite la CNN, otra la televisión local de Boston y la tercera… no me acuerdo, pero creo que era una cadena nacional. Pues la CNN y la tercera están dando la noticia, mientras que la televisión de Boston está retransmitiendo un mensaje del obispo de ánimo a las familias. Creo que sería difícil expresar de forma más evidente a qué presión tuvo que enfrentarse Spotlight.

Por cierto, el auténtico Boston Globe no ha podido resistir la tentación de recopilar todas las noticias publicadas en su momento sobre la investigación junto con todo lo relacionado con la película. Si tenéis mucho interés, podéis leerlo aquí.

Mi particular carrera de los Oscar:

Es tu turno para opinar de esta película: ¿qué te ha parecido? ¿era lo que esperabas? 

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